En el derecho romano, delatio significa la publicación del nombre de una persona a la cual se le otorga un cargo o se le imputa una cosa. Así se habla de delación de la tutela o de la herencia; o se relaciona con uno de los primeros actos del proceso público, llamado nominis delatio, que debía cumplirse por todo aquel que denunciaba o acusaba a una persona por un delito determinado. Más tarde, la delación se confunde con la postulatio, y la expresión sirve para designar la acusación criminal formulada por un ciudadano, conocido entonces como delator.
Cattan Atala, A., & Loyola Novoa, H. (1991). Los delatores. Revista Chilena De Historia Del Derecho, (14), Pág. 35–43. https://doi.org/10.5354/rchd.v0i14.24452